Mensaje contra Moab
1-2 Dios dijo:

«¡El reino de Moab ha quedado en ruinas!
Todos en Moab están de luto,
se han rapado la cabeza
y se han cortado la barba.
En una sola noche fueron destruidas
las ciudades de Ar y de Quir,
de Nebo y de Medebá.

»Los habitantes de Dibón
corren al templo y a los altares
que construyeron en las colinas;
van para lamentar ante sus dioses
tanta destrucción y tanto dolor.
3 En las terrazas y en las plazas
todos se lamentan y gritan de dolor;
la gente va por la calle vestida de luto,
y llora a más no poder.

4 »Los que viven en Hesbón y en Elalé
gritan pidiendo auxilio;
hasta en Jahas se oyen sus gritos.
Los guerreros de Moab
se asustan y tiemblan de miedo».

5 Isaías dijo:

«Siento lástima por el reino de Moab.
Los moabitas están llenos de miedo,
y huyen al pueblo de Sóar;
corren hacia Eglat-selisiya,
suben llorando por la cuesta de Luhit,
y lanzan gritos de dolor
por el camino de Horonaim.

6 »Se han secado los pozos de Nimrim;
la hierba está marchita,
y no queda una sola hoja verde.
7 La gente toma todo lo que tiene
y cruza el arroyo de Los Sauces.

8 »En todo el territorio de Moab
se escucha a la gente pedir auxilio;
sus gritos llegan hasta Eglaim
y se oyen en Beer-elim.
9 Si ahora los pozos de Dimón
están llenos de sangre,
Dios les enviará aun peores castigos,
y los moabitas que queden con vida,
serán atacados por leones.