Salomón edifica el templo
(1 R 6.1-38)
1 Salomón comenzó a edificar el templo del Señor en el monte Moriah, en Jerusalén, en el lugar que David había preparado en la era de Ornán el jebuseo, y que le había sido mostrado.
2 Comenzó la construcción a los dos días del mes segundo del cuarto año de su reinado.
3 Los cimientos que Salomón puso al templo de Dios medían veintisiete metros de largo y nueve metros de ancho.
4 El pórtico que estaba al frente del edificio medía nueve metros de largo, lo mismo que el ancho del templo, y cincuenta y cuatro metros de altura. Lo recubrió por dentro de oro puro,
5 y el cuerpo mayor del edificio lo techó con madera de ciprés, la cual recubrió de oro fino, con molduras de palmeras y cadenas.
6 También recubrió el templo de piedras preciosas para adornarlo. El oro era de Parvaim.
7 De modo que recubrió de oro el templo y sus vigas, umbrales, paredes y puertas, y en las paredes esculpió querubines.
8 Salomón hizo además el lugar santísimo, y medía nueve metros de largo y nueve metros de ancho, como el ancho del frente del templo, y lo recubrió con cerca de veinte mil kilos de oro fino.
9 También recubrió de oro los aposentos. Los clavos eran de oro y cada uno pesaba más de quinientos gramos.
10 En el interior del lugar santísimo puso dos querubines de madera, los cuales fueron recubiertos de oro.
11 Las alas de los querubines medían nueve metros de largo. Cada ala medía poco más de dos metros. Una de ellas llegaba hasta la pared del templo, y la otra tocaba una de las alas del otro querubín.
12 De igual manera, una de las alas del otro querubín medía poco más de dos metros y llegaba hasta la pared del templo. La otra ala también medía poco más de dos metros y tocaba el ala del otro querubín.
13 Las alas extendidas de estos querubines medían nueve metros, y estaban de pie y con los rostros en dirección al templo.
14 Salomón hizo también el velo de azul, púrpura, carmesí y lino, y mandó bordar querubines en él.
Las dos columnas
(1 R 7.15-22)
15 En el frente del templo hizo dos columnas, cada una de las cuales medía casi dieciséis metros de altura. Cada capitel medía poco más de dos metros.
16 Además, hizo cadenas para el santuario, y las puso sobre los capiteles de las columnas. Hizo también cien granadas, y las puso en las cadenas.
17 Las columnas las colocó delante del templo, una a la derecha y la otra a la izquierda. A la que estaba a la derecha la llamó Jaquín, y a la que estaba a la izquierda la llamó Boaz.
Salomón construye el templo
(1 R 6.1-38)
1-2 El día dos del mes de Ziv, cuando ya tenía cuatro años de reinar, Salomón dio la orden para que empezaran a construir el templo de Dios en Jerusalén. Lo construyeron en el lugar que David había elegido, es decir, en el terreno de Ornán el jebuseo, que está en el monte Moria, porque allí Dios se le había aparecido a David.
3 Estas son las medidas del templo de Dios, según lo diseñó Salomón:

Los cimientos medían veintisiete metros de largo por nueve de ancho.
4 El pórtico de la entrada medía lo mismo que el ancho del templo: nueve metros de largo y nueve de alto. Salomón recubrió de oro fino el interior del pórtico.
5-7 Las vigas, las entradas, las paredes y las puertas de la parte interior del edificio principal estaban cubiertas con tablas de pino que, a su vez, estaban recubiertas de oro finísimo. Sobre el oro grabaron palmeras y cadenas, y colocaron adornos con piedras preciosas. Sobre las paredes estaban grabadas figuras de querubines.
8-14 El Lugar Santísimo medía lo mismo que el ancho del templo: nueve metros de largo y nueve de ancho. Para recubrirlo usaron cerca de veinte mil kilos de oro fino. Cada clavo era de oro y pesaba un poco más de medio kilo. Dentro del Lugar Santísimo pusieron dos querubines totalmente recubiertos de oro. Los querubines estaban de pie; sus caras miraban hacia la entrada, y sus alas extendidas medían en total nueve metros, que era todo el ancho del Lugar Santísimo. Cada querubín tocaba con un ala una pared del lugar, y con la otra, tocaba la punta del ala del otro querubín.
La cortina que separaba el Lugar Santísimo estaba hecha de lino fino tejido con lana morada, azul y roja; sobre ella bordaron figuras de querubines.
Los cuartos de la parte superior del templo también estaban recubiertos de oro.
Las dos columnas
(1 R 7.15-22)
15-17 Salomón mandó hacer dos columnas de casi dieciséis metros de altura, y las colocó a la derecha y a la izquierda de la entrada del templo. Sobre cada columna puso un adorno de dos metros veinticinco centímetros de alto. Cada adorno estaba decorado con figuras en forma de cadena, de las cuales colgaban cien figuras con forma de manzana. A la columna de la derecha Salomón la llamó Jaquín, y a la de la izquierda Bóaz.