Ven a defenderme
SALMO 54 (53)
(1-2) David compuso este poema cuando la gente de Zif fue a decirle a Saúl: «Parece que David se ha escondido entre nosotros».
Instrucciones para el director del coro: Este himno deberá cantarse acompañado de instrumentos de cuerda.
1 1 (3) Dios mío,
ven a salvarme,
ven a defenderme;
haz uso de tu poder,
¡muestra quién eres!
2 2 (4) Dios mío,
escucha mi oración;
atiende mis palabras.
3 3 (5) Gente extraña y violenta
me ataca y me quiere matar.
¡Esa gente no quiere nada contigo!

4-6 4-6 (6-8) Tú, mi Dios y Señor,
me das tu ayuda y tu apoyo;
harás caer sobre mis enemigos
el mal que quieren hacerme.

¡Destrúyelos, Dios mío,
pues tú eres fiel!
Yo, con mucho gusto,
te presentaré una ofrenda
y alabaré tu bondad,
7 7 (9) pues me dejaste ver
la derrota de mis enemigos,
y me libraste de todos mis problemas.